La
práctica demuestra que es complicado destacar en todos los ámbitos del saber, es
decir, no todos aprendemos siguiendo el mismo patrón. Para entenderlo, resulta
muy revelador reflexionar sobre quién es más listo si uno que estudia mucho y
sobresale académicamente o el que sin apenas estudios, se desenvuelve ante los
retos que le plantea la vida de forma satisfactoria.
Dicho
planteamiento sirve como punto de partida para hablar sobre las inteligencias
múltiples. La inteligencia no se mide ni se define como algo innato que y
aumentable acudiendo a la escuela, sino que es la capacidad para adaptarse al
medio que nos rodea. Puesto que a todos no nos rodea el mismo ambiente, no
poseemos las mismas capacidades. A este fenómeno se le denomina
"Inteligencias múltiples". Las diversas inteligencias hasta el
momento observables son; lingüística, lógico-matemática, espacial, musical,
corporal-kinética, intrapersonal, interpersonal y naturalista. Somos
inteligentes de muchas formas diferentes, esto no quiere decir que nuestra
inteligencia sea sólo una y carezcamos de las otras, ya que algunas están estrechamente
relacionadas. Poseemos todas sólo que tenemos unas más desarrolladas que otras.
Howard Gatdner, Teoría de las Inteligencias Múltiples |
Antes
esta realidad, nuestro reto como docentes es adaptar nuestra forma de enseñar a
la diferentes formas de aprendizaje. Conseguir que la inteligencia predominante
de cada alumno sirva de trampolín para el desarrollo de las otras. Con este
enfoque tiramos por tierra un concepto anticuado y erróneo. No es una pérdida de tiempo esforzarse en la atención
a la diversidad. En este sentido, aprovecho para poner un caso práctico:
"Mi
tía por parte materna nació sordomuda. Además, mi abuelo falleció cuando mi
madre y mi tía eran muy jóvenes. Mi abuela convencida de que era lo mejor y lo
que estaba dentro de sus posibilidades para garantizarle un desarrollo
educativo óptimo decidió matricularla en un centro para personas sordo mudas.
Era tal el concepto que se tenía en aquella época en lo que se refiere a la
inteligencia de las personas con discapacidad que bordar era lo que más le enseñaban. Aparte de
leer y escribir, cuatro cosas básicas
para comunicarse a través del lenguaje de signos. Como tampoco era un
sector de la sociedad que fuera valorado en ese momento, no existía un
importante avance en lo que se refiere a ese tipo de lenguaje. Mi tía, mi
abuela y mi madre siempre se han entendido a la perfección. Lo que quiero hacer
llegar es que mi tía por necesidad fue capaz de desarrollar su propia
recopilatorio de señas para comunicarse. Por contradictorio que pueda parecer, en
ella despuntaba y despunta su capacidad lingüística por encima de las demás ya
que la necesidad le ha hecho desarrollarla, la intrapersonal ya que conocerse a
sí misma resulta fundamental para hacerse entender eficazmente y la espacial
debido a la naturaleza visual de su mundo"
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